El alcalde de Murcia, José Ballesta, junto al concejal de Barrios y Pedanías, Marco Antonio Fernández, y el concejal de Desarrollo Urbano y Modernización de la Administración, José Guillén, visitó la plaza Antonete Gálvez de Torreagüera, un espacio peatonal de 873 m2 que ha sido completamente renovado y que cuenta nuevos árboles que se suman a los ya existentes, entre los que destacan 3 grandes ficus que proporcionan sombraje natural y frescor a este entorno.
“La renovación y apertura de esta plaza para los 9.000 vecinos de Torreagüera es una de las actuaciones que forman parte del Plan Extraordinario de Inversiones en Pedanías, dotado con 14 millones de euros”, destacó José Ballesta, quien añadió que “continuamos abriendo nuevas zonas peatonales y espacios saludables para los murcianos, poniendo al peatón en el centro de la toma de decisiones, por un municipio más limpio y sostenible”.
Las obras han supuesto la renovación del pavimento con adoquines de distintos formatos y del mobiliario urbano, contando ahora con nuevos bancos de madera y convirtiéndola en una plaza diáfana y amplia, en la que los vecinos podrán disfrutar de eventos, como sus fiestas patronales. En concreto, el Ayuntamiento ha destinado una inversión de 207.127,39 euros.
Busto en memoria de Antonete Gálvez
Esta plaza, además, cuenta con nuevos árboles, como ciruelos de jardín y gazanias que dan color a la plaza y que suman a los ya existentes, entre los que se encuentran 3 grandes ficus, dotando de más espacios de sombra a este entorno, en el que también se ha renovado el alumbrado público. Asimismo, se han realizado trabajos de poda para descargar el volumen de ramas que afectaban a las viviendas colindantes con la plaza.
Este proyecto también ha incluido el traslado del busto en memoria de Antonio Gálvez Arce, el histórico líder cantonal nacido en la pedanía y conocido popularmente como Antonete Gálvez.
Mejora de la accesibilidad
La plaza está dividida en dos alturas separadas por una fuente ornamental, superficies que son ahora accesibles a través de una escalera y de una rampa para personas con movilidad reducida. Junto a esta zona peatonal se suma un espacio reservado para el aparcamiento de vehículos –se han habilitado cinco plazas de aparcamiento en batería a la entrada de la misma–.