En la inspección realizada se han detectado movimientos de efectivo a cuentas extranjeras por un valor aproximado de medio millón de euros
Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado cuatro de marzo a cinco mujeres, dos de ellas presuntamente relacionadas con la comisión de delitos relativos a la prostitución y tres como presuntas autoras de una infracción administrativa por encontrarse en situación irregular en territorio español. Recientemente se ha dado por concluida la investigación iniciada en diciembre de 2013.
Como consecuencia del estudio de los flujos criminógenos en una determinada área territorial y de distintas campañas publicitarias observadas en la prensa escrita y en medios telemáticos, se inició una investigación en torno a un local situado en la zona norte de la ciudad de Murcia.
Tras numerosas pesquisas y vigilancias, persiguiendo dar cumplimiento a lo establecido en la Ley Orgánica sobre los derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social y, con el objeto de verificar la posible existencia en ese local de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, se llevó a cabo una inspección policial en el citado local el cual se encontraba operativo desde septiembre de 2011.
Del análisis de los efectos documentales intervenidos se desprende el evidente ánimo de lucro de los gestores del local al detectarse anotaciones que dejan claro la existencia de una división de un cincuenta por ciento de los ingresos obtenidos entre el prostíbulo y la meretriz en cuestión.
El estudio de los documentos referidos ha permitido detectar movimientos internacionales de efectivo, por parte de los responsables del local, por un valor cercano al medio millón de euros.
En el registro efectuado también se intervinieron numerosas joyas que pudiesen proceder de un presunto blanqueo de los ingresos obtenidos en la explotación de la prostitución de otras personas.
A tenor de todas las evidencias detectadas se ha podido determinar la existencia de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, al tratar de favorecer la inmigración ilegal creando falsas expectativas y un efecto de llamada entre miembros de la comunidad china, país al que pertenecen todas las detenidas.
Las detenidas, de nacionalidad china, tienen edades entre 34 y 51 años. Todas ellas fueron puestas en libertad excepto una de ellas que quedó ingresada en el Centro de Internamiento de Extranjeros.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes a la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental (UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Murcia.