La Junta de Gobierno ha adjudicado a las obras para conservar la muralla situada en el aparcamiento de La Glorieta para que vuelva a lucir como nueva.
Los trabajos, que serán ejecutados por Reformas e Interiorismo Vicons, consistirán en la limpieza, señalización e iluminación para ponerla en valor. El plazo de ejecución es de dos meses.
Los restos arqueológicos, situados en el segundo sótano del aparcamiento, están afectados por la contaminación ambiental y la humedad por lo que es necesario realizar una limpieza profunda de la superficie.
Así, la limpieza, que se realizará de forma manual, facilitará la eliminación del hollín incrustado. Después se aplicará una capa impermeabilizante para conservar los restos y se consolidarán los paramentos de la muralla.
Esta actuación se complementará con la instalación de una nueva iluminación con proyectores que iluminen la totalidad del tramo, incluyendo una luz de color al muro de hormigón armado de la pared con el fin de que sirva de marco expositivo.
Además, los trabajos incluyen el pintado de este muro de hormigón y la barandilla del sótano primero en la zona adyacente a la muralla, la limpieza del pavimento del aparcamiento y la mejora de la cartelería informativa existente
Lo que se pretende con estos trabajos es estabilizar y retardar cualquier deterioro que pudiera originar los distintos factores de afección.
Este tramo de la muralla islámica, de 24 metros de longitud, está compuesto por un bastión o baluarte defensivo de planta rectangular con un lienzo de antemuralla a cada lado...
Construido en el siglo XII, está formado por un tapial de hormigón de cal y formaba parte del sector meridional del sistema defensivo de la ciudad, ubicándose en su proximidad la denominada Puerta del Sol, demolida en el siglo XIX y que daba acceso a uno de los ejes principales de la ciudad islámica.