El concejal de Cambiemos Murcia Sergio Ramos ha denunciado hoy que el proyecto de presupuestos municipales para 2017 propuesto por el PP, que contará con el apoyo del PSOE, solo prevé destinar, sin un criterio claro de reparto, el 3,7 por ciento del total a los barrios y las pedanías, lo que está muy lejos del 8% que contempla el Reglamento de Participación Ciudadana del Ayuntamiento para la gestión directa de los recursos presupuestarios de la Corporación por parte de las juntas municipales.
Ramos ha llamado la atención sobre el hecho de que el Grupo Municipal Socialista respalde este incumplimiento, ya que en varios Plenos municipales ha presentado mociones en sentido contrario, es decir, para que el Consistorio acate lo dispuesto en el Reglamento, e incluso un pedáneo de su partido presentó un recurso contensioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Región de Murcia que concluyó que el Ayuntamiento de Murcia debía aplicar el 8 por ciento.
El edil ha criticado también que el proyecto de presupuestos permite a los presidentes y las presidentas de las juntas municipales de barrios y pedanías contratar de forma unilateral cualquier gasto de hasta 5.000 euros, cuando hasta ahora el máximo era de 3.000, y sin la obligación de contar con tres presupuestos. "Esto supone una falta de transparencia importante ya que la decisión no es de la junta ni de los vecinos y las vecinas, como debería ser, sino exclusivamente del pedáneo de turno".
"Se trata de restar al Pleno de la Junta la capacidad de control y participación en la gestión económica" que, ha explicado Ramos, se suma a otros muchos puntos negativos del proyecto presupuestario como el estancamiento de la cuantía que gestionarán directamente las pedanías, cuyo montante total es de 15 millones de euros. "Insuficiente para las necesidades de las pedanías, y un margen de tiempo muy escaso para invertirlo", pues el presupuesto no estará operativo hasta septiembre y solo habrá apenas tres meses para ejecutarlo.
En cuanto a los barrios, el presupuesto que recibirán este año es inferior en 1,6 millones de euros respecto al de 2016, un "nuevo recorte" que limitará la capacidad de maniobra y de poner en marcha iniciativas que favorezcan la interculturalidad, la integración y la convivencia.
Vuelta al 'Plan E' del ladrillo
Ramos ha hecho referencia a la partida de inversión extraordinaria de 15 millones que el PP ha acordado con el PSOE para destinar a las juntas. La distribución de estos fondos, en lugar de recaer en las juntas municipales, será labor de una Comisión del Ayuntamiento, en la que a juicio de la formación municipalista deberían estar representados los barrios y pedanías.
El objetivo del PP y PSOE con esta partida es realizar obras que no generen mantenimiento, lo que imposibilita la inversión en la construcción de, por ejemplo, escuelas infantiles, bibliotecas o centros culturales, repitiendo así los errores del 'PlanE' que el Gobierno socialista puso en marcha a nivel nacional hace varios años.
"Hablamos de una apuesta por la vuelta al modelo del ladrillo, de las grandes obras faraónicas que sumieron a Murcia en el urbanismo depredador sin consultar, de nuevo, con la ciudadanía murciana".