Vecinos y vecinas de las pedanías de San José de la Montaña, El Palmar, San Ginés y Aljucer se han concentrado esta mañana frente a la Dirección General de Transportes de la Comunidad Autónoma, en la Plaza Santoña, para exigir la restitución del servicio de la Línea 61, eliminada en 2012.
Los manifestantes han pedido públicamente una reunión a tres con la Comunidad Autónoma y el Ayuntamiento para desbloquear la situación en un corto plazo de tiempo. Según han recordado, a propuesta de los cuatro grupos de la oposición y por unanimidad, el Consistorio se comprometió en mayo a financiar con 200.000 euros del presupuesto de 2018 la restitución del servicio, "pero nos hemos encontrado con la negativa del ejecutivo regional".
"Para que no nos mareen de un despacho a otro, lo que queremos, por respeto a los vecinos y vecinas, es una solución coordinada entre ambos ejecutivos", ha añadido Francisco Guirao, uno de los portavoces de la Plataforma.
Los manifestantes, que han coreado consignas como "Transporte público para todos", han afirmado que la línea 18, que sustituyó a la 61, no cubre las necesidades de los residentes en las tres pedanías, "especialmente de las personas mayores o en situación de dependencia que necesitan acercarse al centro o los hospitales de referencia para recibir asistencia sanitaria". Por eso, han manifestado su intención de continuar con las protestas tras el verano en el caso de que se mantenga la situación.
Ambas líneas, como todas las que unen las pedanías, son de titularidad regional, por lo que debe ser la Comunidad Autónoma la que modifique el contrato con la empresa concesionaria del transporte público, Latbus. Sin embargo, en el encuentro que tuvieron hace semanas representantes de la Plataforma Vecinal por la Recuperación de la Línea 61 con el director general de Transporte, José Ramón Diez de Revenga, la respuesta que obtuvieron era que "no iba a poner una línea para cuatro vecinos, ni un autobús para cada vecino en su puerta".