José Ballesta presenta el proyecto del nuevo espacio que se abrirá la próxima primavera como un punto de referencia para la difusión del legado natural, cultural, paisajístico e histórico de la Huerta de Murcia. El Centro dispondrá de las últimas innovaciones y ofrecerá información en diferentes idiomas, lo que permitirá a visitantes de distintas nacionalidades conocer los orígenes de la Huerta y La Contraparada, declarada Bien de Interés Cultural.

El alcalde de Murcia, José Ballesta, y el concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta, Antonio Navarro, han presentado esta mañana el proyecto del Centro de Visitantes de La Contraparada, una de las medidas centrales del Plan de Acción de la Huerta, que se abrirá la próxima primavera como un innovador y vanguardista punto de referencia para la difusión del legado natural, cultural, paisajístico e histórico de la Huerta de Murcia.

El Centro, cuyas obras de adecuación y equipamiento tecnológico ya se han adjudicado y comenzarán en los próximos días, estará dotado de las últimas innovaciones y ofrecerá información en diferentes idiomas, lo que permitirá a visitantes de distintas nacionalidades conocer los orígenes y evolución de la Huerta de Murcia y la riqueza patrimonial de La Contraparada, reconocida como Bien de Interés Cultural y área de especial valor ecológico.

La presa de La Contraparada o Azud Mayor fue construida entre los siglos IX y X y distribuye el agua del Segura por toda la Huerta de Murcia. “Hoy, doce siglos después, este portentoso diseño de ingeniería hidráulica ideado por nuestros antepasados, sigue funcionando y canalizando el agua a través de la  red de 310 kilómetros de acequias y azarbes que recorre nuestro municipio”, destacó el alcalde.

José Ballesta añadió que “el Plan de Acción de la Huerta de Murcia es la iniciativa medioambiental y sociocultural más importante de las últimas décadas, una visión vertebradora de todo el municipio, que conecta las pedanías murcianas, el centro histórico y su río, y que, gracias a este nuevo Centro Internacional de Visitantes, ahora se abre al mundo como lugar de visita obligada en nuestro municipio, que aúna raíces y alas, tradición y vanguardia”.

El inmueble, cuya adecuación y dotación de equipamientos tiene un coste de 340.000 euros y un plazo de ejecución de 9 meses, se abrirá como un museo interactivo de la Huerta distribuido en dos plantas, que dispondrá de videowall y soportes interpretativos basados en módulos y exhibiciones tridimensionales, que combinan volúmenes con texto, medios gráficos y medios tecnológicos, ofreciendo una variada gama de propuestas visuales, de audio e interactivas.

‘El río que da la vida’

La planta baja estará destinada a espacio de recepción de visitantes donde podrán informarse sobre todos los aspectos del centro, recoger una guía multimedia o descargarse programas QR para dispositivos móviles que les ayuden a completar los contenidos de la visita.

El principal recurso de esta planta baja consistirá en una sala audiovisual que exhibirá uno de los principales atractivos con los que se dota al Centro: el audiovisual ‘El río que da la vida'. Este audiovisual supondrá una potente introducción interpretativa de todos los aspectos tratados en el Centro sobre la huerta y el río y estará realizado con animaciones 2D y 3D, uso de drones para imágenes aéreas, uso de actores y variados efectos infográficos.

La planta baja contará además con una amplia sala multiusos, que supondrá un espacio dinámico para su utilización como salón de actos y espacio multifuncional adecuado para la realización de talleres y seminarios, proyecciones, presentaciones, exposiciones temporales, charlas, etc.

La Huerta y la gastronomía local

El acceso a la planta alta se realizará a través de una escalera dotada de videowall, con diversos recursos visuales de iluminación y pantallas. La planta alta se ha proyectado como un amplio espacio con un ambiente unitario y agradable en el que se desplegarán los contenidos en cuatro grandes ámbitos temáticos.

El primer ámbito refleja el origen, la historia y la evolución del río Segura, la huerta y la Contraparada, un segundo ámbito sobre cultivos y aprovechamientos en la huerta de Murcia, centrándose en las técnicas tradicionales agrarias, las variedades locales, la biodiversidad en los cultivos, los principales productos de la huerta de Murcia y la gastronomía local.  Un tercer eje dedicado a la identidad y la cultura huertana, y un último destinado a la interpretación de los principales valores ecológicos y ambientales de La Contraparada y del río Segura.