El Teatro Circo Murcia (TCM) acoge esta semana dos estrenos, el del espectáculo de danza ‘Vigor Mortis', que tendrá lugar este jueves, 23 de enero, y el de la obra de teatro ‘Locos de amor', el próximo sábado, 25 de enero. Este último espectáculo correrá a cargo de la compañía murciana Trama Teatro y parte de un texto del aplaudido dramaturgo estadounidense Sam Shepard.
‘Locos de amor', que contará con música en directo, es un drama protagonizado por Diana Torres, Pablo Guzmán y Fernando Caride que dirigen Pepa Castillo y Natalia Y. Rodríguez, también encargada de versionar la obra de Shepard. Sobre el escenario, personajes perdedores que parecen haber renunciado a sus sueños; jóvenes llenos de sentimientos encontrados, con un pasado del que no pueden huir y cuya vida gira en torno al amor y a la música.
Ironía, crueldad e intriga, además de poesía y música, son los ingredientes de esta historia de amor y desamor. Eddie va al encuentro de May para intentar reanudar una relación que ha sido intermitente durante años, pero el joven se encontrará con el rechazo de ella. May está iniciando una nueva relación con Martin, pero esta no será la única amenaza para Eddie.
Antes de este estreno teatral, el TCM acogerá la presentación de otro nuevo espectáculo, en esta ocasión de danza. La compañía ilicitana OtraDanza trae al TCM este jueves, 23 de enero (21:00 horas) ‘Vigor Mortis', una propuesta escénica en la que el movimiento y la teatralidad se unen para adentrar al espectador en el siempre misterioso y cuestionado ‘mas allá'.
Los espectadores vivirán un relato de pesadillas y ensoñaciones, un tragicómico viaje del cielo a lo insondable del alama humana, inquietante y sugerente a partes iguales, y en el que, además del movimiento y la gestualidad, cobran protagonismo el ritmo, los sonidos y una especial escenografía.
‘Vigor Mortis' reúne sobre la escena a dos intérpretes de amplia y consolidada trayectoria: Asun Noales, responsable asimismo de la dirección artística, y Carlos Fernández. También destaca la participación en la dirección escénica -junto a Noales- de Rulo Pardo, actor y director de la compañía seXpeare, cuyo trabajo ha añadido teatralidad al espectáculo y una dosis de comedia y gestualidad característica de sus propios trabajos y que aquí se integra con el lenguaje abstracto de la danza.