"Desde el Movimiento Feminista de Murcia hemos organizado una serie de acciones y actividades que creemos que tienen en cuenta la interseccionalidad de los feminismos y la transversalidad de las violencias que nos afectan. 

Arrancaremos la semana con el siguiente calendario:

Sábado, 29 de febrero, "Conversatorio Feminista: violencias interseccionales", una Jornada de información y debate , de 12h a 21h en el Huerto de Santa Eulalia, con una comida popular incluida, así como un mercadillo solidario.

Intervendrán, la Asociación Absolución Jóvenes de las Vías, CATS, Convivir sin racismo, WDR (Mujeres en defensa de Rojava), la PAH, ATIM, Sindicato OTRAS. También se hablará de Economía ecofeminista. 

Domingo, día 1 de marzo, "No estamos todas, faltan las presas" Concentración en la cárcel de Campos del Río en apoyo a las presas. Partiremos en caravana de coches a las 10h desde el aparcamiento del Auditorio.

Lunes, día 2 de marzo, por la mañana "Por qué las pensiones deben estar incluidas en las reivindicaciones del 8M?" a las 11h, conversatorio, frente al INSS, en Alfonso X el Sabio, con Yay@flautas de Murcia y la COESPE mujeres.

Por la tarde, Proyección del documental "El sol del Nord: construyendo la autonomía de Bakur", con tapeo vegano, a las 19,30h, en cafetería Ítaca, organizado por Women Defend Rojava Murcia.

Martes, día 3 de marzo, "La voz de l@s niñ@s en la violencia machista", a las 12h, lectura de manifiesto y su reparto en el Palacio de Justicia, para visibilizar y denunciar las lógicas machistas, misóginas y racistas de la justicia con casos de mujeres y sus menores en Murcia, con la asociación de madres en defensa de l@s niños y niñas. 

Jueves, día 5 de marzo, "Feministas contra la represión, también en las vías", a las 19h, Taller de pancartas en el Jardín de Floridablaca, marcha hacia las vías por Torre de Romo hasta la pasarela y allí, Concentración a las 20h, con la Asociación Absolución Jóvenes de las Vías, (encausados por los altercados ocurridos en Santiago el Mayor a raíz del soterramiento del AVE)

Viernes, día 6, "Mujeres anarquistas en la Región de Murcia durante la Guerra Civil", charla-coloquio a las 18h en La Libélula (bar vegano).

Sábado, día 7, 23,30h, en la plaza de La Merced, "Taller de defensa feminista y piquete nocturno con luces violeta".

Domingo, día 8, Huelga Feminista. Por la mañana, 11h,   "Piquete Antirracista" desde Santo Domingo

Comida popular a las 14h en el Jardín de La Fama

Por la tarde, MANIFESTACIÓN a las 18h, Plaza de la Fuensanta.

Lunes 9, por la mañana, Piquete estudiantil, a las 9h en la plaza de La Merced, Piquete imPAHrable por el derecho a la vivienda, a las 11,30h desde Sto. Domingo.

Por la tarde, "Acción contra la explotación laboral", plaza de la Fuensanta, y alas 20h, "Cierre de Huelga", en la plaza de la Merced.

El Movimiento Feminista de Murcia convoca Huelga de Cuidados y Cosumo. Nos gustaría, lógicamente, que se convocara una huelga laboral y estudiantil el próximo domingo 8 de marzo y que se extendiera hasta el lunes (por ser laborable) para dar una mayor visibilidad a nuestras reivindicaciones. Desgraciadamente, por la legislación vigente, nuestro movimiento social no tiene la capacidad legal de convocar una huelga y, en este sentido, nos parece lamentable y vergonzoso que agentes que sí tienen la capacidad de convocarla no lo hayan hecho, principalmente  los sindicatos mayoritarios de CCOO y UGT. Únicamente la CGT ha considerado nuestra demanda y ha  puesto en marcha los mecanismos legales para convocar esa huelga. Falta que la CARM dé la autorización.

En este sentido la huelga (o las manifestaciones y concentraciones puntuales de un sólo día) podría verse como una herramienta útil de visibilización, protesta y denuncia aunque creemos que resulta insuficiente  como parte de la solución a un proyecto político tan complejo y demandante como es el de los feminismos. 

Además, en un escenario de precariedad y crisis como en el que nos encontramos, muchas personas no pueden permitirse el lujo de sumarse a la huelga (el simple hecho de decirlo ya así, de considerar que ir a una huelga es un lujo, un privilegio al alcance de unas pocas ya nos tendría que dar qué pensar) y muchos trabajos que desempeñamos tradicional y mayoritariamente las mujeres (como son los cuidados, el trabajo maternal, el trabajo doméstico ni siquiera son remunerados ni han logrado conseguir todavía, pese a las tantas y tantas reivindicaciones, el estatus o el reconocimiento de verse como trabajos.  En el caso de la prostitución sí está remunerado pero las trabajadoras del sexo siguen en su lucha por la consecución de sus derechos laborales. Hemos de decir que la asamblea del Movimiento Feminista de Murcia es de las pocas  a nivel estatal, que se posiciona abiertamente Pro-derechos en el tema de la prostitución (ni abolicionistas ni regulacionistas). 

 Por si esto no fuera ya lo suficientemente desalentador, nos encontramos en todo el Estado español con que el feminismo es aplastantemente blanco y de clase media. Esto quedó perfectamente claro con el caso de las trabajadoras marroquíes de la fresa en Huelva, tenemos mucha autocrítica por hacer y mucho que trabajar con las compañeras antirracistas y decoloniales. 

Los feminismos, tanto para los partidos como para los sindicatos y los organismos institucionales (y muchos medios de comunicación), sólo consiguen algo de visibilidad y atención en los casos de feminicidios o en las violencias que se derivan de las relaciones de parejas o exparejas, dejando sistemáticamente de lado e ignorando (por falta de formación feminista y mirada transversal) todas las demás violencias que nos atraviesan. 

La perspectiva desde la que se abordan estos únicos casos de visibilización de violencias machistas es también victimista, proteccionista e infantilizadora y sólo contribuyen a reforzar el rol subordinado de la mujer y a justificar unas políticas destinadas únicamente a proteger al (todavía presente en el imaginario) que sin ninguna duda consideran el sexo débil. Posiciones y perspectivas que consideramos siguen lógicas patriarcales y que sirven para justificar el papel del Estado (en sus distintas variables) y que, en última instancia, no están sirviendo en absoluto para erradicar la violencia contra las mujeres y personas LGTBIQ+, con esa visión limitada, reduccionista y de dejadez por parte de las instituciones."