El alcalde de Murcia, José Ballesta, acompañado por la vicealcaldesa y concejal de Fomento y Patrimonio, Rebeca Pérez; el concejal de Pedanías y Vertebración Territorial, Marco Antonio Fernández; y el alcalde pedáneo de Monteagudo, David Campoy, ha visitado hoy las excavaciones que se están realizando en el Castillejo de Monteagudo.
Se trata de la primera vez en la que los visitantes pueden contemplar el avance de los trabajos arqueológicos en este enclave patrimonial. Esta visita guiada se repetirá también mañana miércoles y pasado jueves. El grupo está limitado a un máximo de 20 personas por visita, siendo preciso inscribirse para participar. La inscripción es gratuita y se puede hacer en el siguiente enlace: https://eventos.murcia.es/102627/detail/visita-a-las-obras-de-el-castillejo.html
Ballesta ha destacado que "el objetivo es que de estas excavaciones, estas intervenciones, estos estudios que se están haciendo, sean partícipes todas las murcianas y murcianos. Esto es un patrimonio de todos".
De esta manera, el primer edil ha comprobado, de primera mano, los últimos hallazgos encontrados por los arqueólogos en este este importante elemento patrimonial, incluido en el proyecto estratégico ‘Las Fortalezas del Rey Lobo'.
Estos trabajos presentan una importancia singular, ya que constituyen las primeras excavaciones que han realizados los arqueólogos en el último siglo en el Palacio de Ibn Mardanis, en el Castillejo de Monteagudo.
José Ballesta ha recorrido la zona en la que un equipo multidisciplinar, formado por 24 expertos, trabaja en la elaboración de un diagnóstico exhaustivo del estado que presenta el entorno, donde no se realizaba ninguna prospección desde las que lideró el historiador Andrés Sobejano en los años 1924 y 1925. Este equipo de trabajo ha realizado en los últimos tres meses un total de 30 sondeos, bajo la supervisión de 8 arqueólogos y 1 arquitecto.
El estudio que están realizando los técnicos sentará las bases para elaborar el Plan Director del Castillejo, que determinará los trabajos a realizar y establecerá la hoja de ruta para la puesta en valor de los hallazgos resultantes en las excavaciones.
El alcalde de Murcia ha comprobado el avance de las intervenciones que los técnicos están ejecutando en los recintos inferior y superior del Palacio fortificado del emir Ibn Mardanis, entorno que se encontraba inédito para los investigadores desde hace 100 años.
En concreto, en el recinto superior, los técnicos están terminando los dos sondeos del interior de la balsa con el objetivo de comprobar el daño causado durante su construcción, y comprobar qué se conserva de las alberquillas.
Labores de limpieza en la zona del andén norte
Por otro lado, los expertos también están acometiendo labores de limpieza de la zona del andén norte, ya que están saliendo a la luz estructuras que no se tenían claras en los planos propuestos previamente por investigadores. Estos nuevos hallazgos acercan una realidad más aproximada y precisa de la organización que presentaba el recinto superior.
Asimismo, también se está limpiando el interior de la torre, con el fin de comprender el interés arquitectónico y las posibles fases de construcción y uso que tuvo el edificio.
En el recinto inferior, se están colocando andamios y se trabaja en la limpieza arqueológica de la parte exterior de las torres de abajo.
Estas actuaciones forman parte del desarrollo del proyecto estratégico ‘Las Fortalezas del Rey Lobo', que también ha supuesto el desarrollo en las últimas semanas de trabajos arqueológicos en la Alberca de Larache y la Alberca del Molino Armero, gracias a la gestión coordinada seguida entre el Ayuntamiento de Murcia y la Consejería de Cultura del Gobierno regional, un trabajo cohesionado que ha permitido al Consistorio obtener una financiación de 400.000 euros que ha permitido sufragar el desarrollo de los trabajos.
Un nuevo jardín andalusí en la Alberca de Larache
De hecho, las investigaciones realizadas durante este verano han permitido a los arqueólogos descubrir el que podría ser un gran jardín andalusí en la Alberca de Larache, en concreto, los investigadores han encontrado restos de una construcción de ladrillos que apunta a que este elemento patrimonial posiblemente no fuera una balsa de almacenamiento de agua, como se creía hasta ahora, sino un recinto ajardinado con una fuente central y varias canalizaciones a su alrededor. Sin embargo, otras voces expertas defienden la primera hipótesis.