El portavoz socialista lamenta la situación del Real Murcia, un club centenario con miles de aficionados, que ha sido gestionado como un proyecto sin alma por Samper, con el consentimiento de alcalde Cámara, que desde el principio, ha mirado hacia otro lado
El portavoz del Grupo Socialista, Pedro López, lamenta, en primer lugar, la situación por la que atraviesa el Real Murcia porque "aunque sea la crónica de una muerte anunciada, se trata de nuestro club deportivo, un club centenario, con miles de aficionados, que ha tenido la mala suerte de encontrarse con un gestor sin alma, Samper; y un alcalde, Miguel Ángel Cámara, que puso a sus pies la ciudad y el futuro de los murcianos, tras la firma del convenio Nueva Condomina, por la que ambos están imputados.
"Son socios del fracaso del Real Murcia y ambos están imputados por la justicia", insiste López, quien pide a Cámara que deje de tenerle miedo a Samper y le exija su salida inmediata de un club al que solo ha llevado a su hundimiento, al caos más absoluto en estos 17 años, de los cuales solo dos ha estado en Primera División.
Así mismo, el portavoz socialista apuesta porque el Ayuntamiento promueva un proyecto ilusionante para el Real Murcia y su afición, pero sin Samper; un proyecto que devuelva al club deportivo al lugar que merece, y que esté gestionado por personas con alma que crean en él, que sientan de verdad sus colores y que les importe esta ciudad y esta Región.
Además de gestionar la salida de Samper y la puesta en marcha de un proyecto ilusionante, López propone, conseguidos estos dos puntos, que desde el Consistorio se haga un llamamiento a los murcianos para aumentar el número de socios y que "esta andadura incierta por el infierno de la Segunda B sea lo más leve y rápida posible".
Para finalizar, el portavoz socialista recuerda a Cámara y a Samper que el club Real Murcia no es un negocio en exclusiva, es un club centenario, con miles de aficionados, que han visto cómo sus ilusiones se han ido al traste por una gestión pésima y un Gobierno del PP que ha convertido a Samper en el adalid de los proyectos faraónicos que benefician a unos pocos y atentan, con total descaro, contra el interés general, el de todos los ciudadanos.