De las 2.540 pruebas se detectaron 56 conductores que superaban las tasas de alcoholemia, de los que cuatro resultaron detenidos
Otros diez conductores se encontraban bajo los efectos de drogas
También tres de los conductores fueron detenidos por carecer de permiso de conducir
Durante la semana pasada y coincidiendo con la celebración de las Fiestas de Primavera en la capital, la Guardia Civil de la Región de Murcia ha desplegado un amplio dispositivo simultáneo de verificación de alcoholemias y drogas en distintas carreteras de la Región de Murcia, compuesto por más de medio centenar de efectivos del Sector de Tráfico, en el que se ha controlado a 2.540 conductores, de los cuales 56 superaban las tasas máximas de alcoholemia permitidas y diez conducían bajo los efectos de drogas. Otros tres conductores han sido detenidos por carecer de permiso de conducir.
Este tipo de dispositivos se realizan con el objetivo de concienciar a los conductores de los peligros que suponen conducir bajo los efectos del alcohol y de las drogas, y están enmarcados en el 'Plan Operativo de Respuesta Policial al Tráfico y Consumo de drogas en zonas de ocio y diversión', así como en la Estrategia de Seguridad Vial 2010-2020 de la Dirección General de Tráfico.
En especial destacan los dispositivos desplegados durante los días 7 y 12 de abril, coincidiendo con la celebración del Bando de la Huerta y del Entierro de la Sardina respectivamente, en las carreteras de las proximidades de la ciudad de Murcia, en las que fueron detectados 56 conductores superando la tasa máxima de alcoholemia (2,20%), de los que cuatro resultaron detenidos y puestos a disposición judicial, así como otros 52 denunciados ante la Jefatura Provincial de Tráfico de Murcia. De igual modo, en estos dispositivos fueron denunciados diez conductores por circular habiendo tomado drogas u otras sustancias estupefacientes prohibidas e incompatibles con la conducción de vehículos, como cocaína, cannabis y opiáceos.
En estos controles también se detectó a tres personas que conducían encontrándose privadas del permiso de conducir, por resolución judicial o administrativa, por lo que fueron detenidas y puestas a disposición judicial.
Con estas actuaciones, para continuar en la línea positiva de reducción de la siniestralidad, la Benemérita persiste en concienciar a la población de la incompatibilidad del consumo de bebidas alcohólicas y drogas con la conducción de vehículos, y así evitar que se produzcan accidentes de circulación, garantizando la seguridad vial y el normal desarrollo de estos eventos multitudinarios en nuestras carreteras, en las que afortunadamente no se ha registrado ningún accidente de importancia en nuestra Región.
Conducir un vehículo a motor o ciclomotor con una tasa de alcohol en aire espirado superior a 0'60 mg/l lleva aparejada la detención del conductor, por supuesto delito contra la seguridad vial, castigado con penas de prisión de 3 a 6 meses o multa de 6 a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y en cualquier caso la privación del permiso por un tiempo de 1 a 4 años.
Asimismo conducir un vehículo a motor o ciclomotor en caso de pérdida de vigencia del permiso, por haber sido privado de la totalidad de los puntos asignados legalmente o habiendo sido privado cautelar o definitivamente del mismo por resolución judicial, supone la detención del conductor, por supuesto delito contra la seguridad vial, sancionado con penas de prisión de 3 a 6 meses o multa de 12 a 24 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días.
La conducción de vehículos a motor o ciclomotores con tasas de alcohol superiores a 0'25 mg/l 0'15 mg/l, conductores noveles y profesionales y hasta 0'60 mg/l, tras la reciente reforma de la Ley de Seguridad Vial, supone una sanción económica de hasta 1.000 euros y la pérdida de hasta 6 puntos del permiso de conducir.
La conducción habiendo ingerido drogas u otras sustancias prohibidas, pueden determinar la comisión de un supuesto delito contra la seguridad vial, o en su caso una denuncia administrativa, sancionadas en los mismos términos. En estos casos, una vez realizada la prueba indiciaria de detección de drogas en saliva, los conductores están obligados a facilitar una segunda muestra de fluido oral para su remisión a un laboratorio acreditado y contrastar el resultado provisional, conforme a la normativa vigente.
En todos los casos, los vehículos afectados son inmovilizados por la Guardia Civil hasta que sus conductores se encuentren en condiciones de proseguir viaje, una vez que hayan rebajado el nivel de alcoholemia dentro de los límites permitidos o desaparecida la presencia de las drogas, o bien, se hagan cargo de los vehículos otros conductores que se encuentren habilitados y previas las pruebas oportunas.
La Guardia Civil reitera su mensaje a aquellos conductores que, de forma imprudente y temeraria, a pesar de las campañas y advertencias de la Dirección General de Tráfico, conducen después de haber bebido o tomado drogas, recordando que se seguirá intensificando la realización de los controles a cualquier hora del día o de la noche, para evitar pérdidas personales y las lamentables consecuencias que acarrean los accidentes de tráfico, en especial durante los fines de semana y celebración de eventos de ocio de masiva afluencia de vehículos, apelando al empleo de medios de transporte colectivos o fórmulas alternativas para estos desplazamientos que no sean ponerse al volante en estas condiciones, en especial por parte de los conductores más jóvenes.