Ante la sentencia del Tribunal Supremo que los vecinos de la Senda de Granada de Murcia ha hecho pública esta mañana, donde el alto tribunal ha anulado la modificación n.º 50 del Plan General de Ordenación Urbana de Murcia, la Asociación para la Conservación de la Huerta de Murcia quiere felicitar a estos vecinos, que con su esfuerzo, dinero y lucha ha conseguido, tras 12 años, un “pronunciamiento histórico a favor de la Huerta de Murcia y contra el urbanismo arrasador defendido por el Ayuntamiento y la Comunidad Autónoma.
Desde HUERMUR resaltamos la importancia de este fallo del Tribunal Supremo, inapelable y sin capacidad de recurso por ninguna de las partes, donde se reconoce la reivindicación histórica de unos vecinos que, sin ninguna ayuda pública ni apoyo, han mantenido la defensa del paisaje, de la forma de vida tradicional, y de la protección de un suelo de huerta de alto valor ambiental.
Para la asociación HUERMUR, la sentencia viene a enmendar la plana a la política arrasadora de la Huerta que el Ayuntamiento y la Comunidad Autónoma han venido desarrollando en los últimos 20 años, administraciones que han dejado desprotegido el suelo más importante que tenemos en Murcia, la huerta tradicional, permitiendo arrasarla mediante un urbanismo impersonal y aberrante, desde el punto de vista paisajístico, patrimonial y social.
Hay que recordar que en la tramitación de esta modificación n.º 50 del Plan General de Ordenación Urbana, ahora declarada nula por el Tribunal Supremo, intervinieron algunos políticos que ahora cuentan con la más alta responsabilidad en el Ayuntamiento de Murcia, y también con otros que se encuentran implicados en diversos casos de presunta corrupción urbanística.
Para HUERMUR, estos mismos políticos a los que se les llena la boca hablando de la huerta, de su protección y de conservación, no cuentan con ninguna credibilidad para ello, ya que son los que, por acción u omisión, permitieron que una actuación urbanística ahora declarada ilegal, plantara una masa de torres de horrendos edificios donde solo debían conservarse el paisaje tradicional de la Huerta de Murcia, con viviendas familiares y plantaciones de frutas y hortalizas.
Igualmente, desde HUERMUR queremos destacar nuestra solidaridad con las más de 1000 familias de jóvenes murcianos que, desde la buena fe y con el ánimo de construir sus hogares, compraron sus viviendas en esta zona, pero que han visto como una gestión pública nefasta sumada al afán especulativo de unos cuántos, ha acabado por dejar fuera de ordenación urbanística sus casas, que nunca se tenían que haber levantado en esta zona, según falla el Tribunal Supremo, pero que sin tener que infringir el ordenamiento urbanístico se podrían haber llevado a cabo en otras zonas del municipio.
Esta modificación del PGOU, que conlleva la anulación automática de todas las actuaciones posteriores en la zona, incluso las licencias de edificación, deja a estas familias en una situación de desamparo y falta de seguridad jurídica, creando una situación lamentable y que no se habría producido con unas administraciones responsables y actuando dentro de la ley.
Esperamos que el Ayuntamiento de Murcia y la Comunidad Autónoma cumplan y acaten esta sentencia, no restándole importancia ni intentando seguir con el mismo modelo urbanístico, que se ha demostrado no ya solo fallido, sino también fuera de la ley. Cualquier intento de continuar ampliando esta urbanización o promoviendo nuevos proyectos de esta forma, acabará de la misma manera que esta modificación n.º 50, por lo que desde HUERMUR instamos a todos los implicados a que vuelvan a la senda de la ley y del cumplimiento de la normativa vigente.