El Pleno municipal ha aprobado en su sesión de hoy por unanimidad de todos los grupos políticos que Murcia se adhiera al manifiesto y decálogo ‘En bici, por la salud y contra el cambio climático' y que el Ayuntamiento lleve a cabo las iniciativas correspondientes para su aplicación en el municipio.
Según la moción conjunta "la bicicleta, uno de los medios de transporte más eficaces en corta-media distancia, debe ser uno de los actores de esta transformación de la ciudad de Murcia".
El decálogo aprobado incluye las siguientes acciones:
1. Creación de una red verdadera de vías ciclistas en el casco urbano de Murcia, interconectada con las pedanías de manera:
a. Coherente: que ofrezca buena cobertura del territorio, priorizando los principales ejes de desplazamientos.
b. Directa: en términos de distancia y de tiempo, pues la bicicleta es un vehículo de tracción humana.
c. Segura: el tráfico ciclista debe estar segregado del motorizado y de los peatones, y debe dar confianza a usuarios desde los 8 a los 80 años.
d. Cómoda: con un diseño fácil de seguir y una señalización adecuada.
e. Accesible y continua: con facilidad de acceso desde otras vías e ininterrumpida; que diferencie los carriles dedicados al ocio y el esparcimiento de los destinados al uso de la bici como medio de transporte.
2. Implantación definitiva de los proyectos anunciados reiteradamente por el Ayuntamiento desde 2010, añadiendo el eje de San Juan de la Cruz del barrio del Infante. Se ha ejecutado únicamente el que no era prioritario y circunvala la ciudad por el extrarradio (Avenida de Los Dolores y Miguel Induráin).
3. Que las vías ciclables conecten el centro, los barrios, los centros de formación (colegios, institutos y campus universitarios), los concentradores de empleo (polígonos industriales próximos a la localidad) y los centros de atracción de visitantes - turistas. Que estas vías atraviesen el Centro Histórico y que un plan de peatonalización, con la señalización adecuada, permita la coexistencia de bicicletas, peatones y tráfico motorizado en el corazón de la ciudad de Murcia.
4. Que los centros educativos de todos los niveles, tengan prioridad para su inclusión en los nuevos ejes, destacando la conexión de la plaza Circular con el Campus de Espinardo mediante un verdadero acceso ciclable, segregado y seguro, que elimine la peligrosidad de su entrada principal
5. Que las vías ciclistas sacrifiquen el espacio de los coches antes que el peatonal. Los ciclistas no queremos anular espacio al peatón, y reivindicamos que la calzada sea segura para circular en bicicleta. Por ello, exigimos con firmeza (porque nos va la vida en ello) un tratamiento especial en rotondas o cruces peligrosos.
6. Que el mantenimiento del viario ciclista existente sea el adecuado (limpieza, drenaje, señalización vertical y horizontal, rebajes de bordillos, socavones, poda de setos y arbolado adyacente, etc.).
7. Que se adopten medidas de reducción de los vehículos a motor, objetivo fundamental del Plan Director de la Bicicleta (2010), limitando a 30km/h la velocidad en toda la ciudad (Plan 30).
8. Implantación paulatina de caminos escolares seguros, promoviendo la participación de comercios locales, policía local de barrio, asociaciones de padres, colegios e institutos.
9. Ofrecer una intermodalidad real, que permita la combinación de desplazamiento de tramos cortos en bicicleta y largos en tranvía, autobús o trenes de cercanías. Actualmente, sólo existe una línea de autobús con un suplemento para bicicletas, pero al ser un recorrido corto resulta de dudosa utilidad.
10. Que no se criminalice al usuario de la bicicleta. Los ciclistas tienen que respetar la normativa y deben sancionarse las infracciones y actitudes vandálicas, pero nunca en el entorno de una campaña dirigida y generalizada. La ausencia de infraestructuras ciclables es un factor de riesgo para el ciclista, que necesita protección. Pedimos una ordenanza municipal específica sobre tráfico ciclista y peatonal.