Las trabajadoras de Ferrovial encargadas de la limpieza de los edificios del IMAS (Instituto Murciano de Acción Social) han iniciado una huelga indefinida para exigir el cobro del 16,5 por ciento que la Comunidad Autónoma eliminó de sus nóminas mensuales en 2013 tras un recorte de cinco millones de euros en el presupuesto destinado a este servicio.
Las empleadas han explicado que ya trasladaron esta demanda a la empresa y que esta responsabilizó del pago a la dirección general de Patrimonio. Sin embargo, esta última sostiene que quien tiene que abonar el tanto por ciento reclamado por la plantilla es Ferrovial.Entre las consecuencias que sufren las trabajadoras, se encuentra la reducción de su jornada la laboral y la consecuente disminución de su sueldo. "Muchas no cobramos más de 400 euros al mes", sostienen, si bien la peor parte es la de aquellas que se van a jubilar próximamente.
En este caso, se trata de empleadas que han cotizado más de los años necesarios pero que, al haber sufrido el recorte hace cinco, "les quedará una pensión de 300 euros".A esta situación de precariedad laboral hay que añadir que las trabajadoras han denunciado amenazas e insultos por parte de la dirección de los centros en los que trabajan.Hace aproximadamente un mes, enviaron un escrito a los grupos políticos representados en la Asamblea regional y están a la espera de que desde estos se ponga solución a su situación.