La Comunidad restaurará la imagen de la Santísima Virgen de la Fuensanta, patrona de la ciudad de Murcia y su huerta. La intervención se llevará a cabo en el Centro de Restauración de la Región de Murcia, dependiente de la Consejería de Turismo y Cultura.
La imagen se va a someter a un proceso de restauración en dos fases: la primera consistirá en un estudio intrínseco y extrínseco para establecer los daños que presenta dicha imagen. Una segunda fase consistirá en la restauración integral de la obra, tras los resultados de las conclusiones llevadas a cabo en la primera fase.
Está previsto que antes de la romería de septiembre se realice un exhaustivo estudio sobre el estado de la talla para detectar posibles problemas de intervenciones anteriores o cualquier patología que pueda estar afectándole, procediendo a su recuperación y limpieza con el objetivo también de contribuir a su mejor conservación.
El Centro de Restauración dispone de una tecnología puntera en materia de instrumental tecnológico y sistemas de análisis que determinarán con alta precisión los daños reales de Nuestra Señora de la Fuensanta. Así, las instalaciones cuentan con aparatos de Rayos X, Rayos Infrarrojos, Ultravioleta; instrumental de endoscopia, reflectografía, macrofotografía digitalizada, estudios estratigráficos, etc.
Desde el Centro de Restauración se ajustarán los tiempos para que todas aquellas actividades vinculadas con los procesos de intervención y restauración de la talla no interfieran en los principales actos litúrgicos y religiosos de dicha imagen.
Todo el proceso de estudio y trabajos realizados a la imagen quedarán reflejados en una memoria final, que será entregada al Cabildo Catedral de Murcia.
La Virgen de la Fuensanta
De la imagen de la Virgen de la Fuensanta se tiene constancia desde el siglo XV. Fue en 1802 cuando se llevó a cabo la primera restauración de alcance de la que se tiene noticia, que llevó a cabo el escultor Roque López, discípulo principal de Salzillo.
La imagen, de cuerpo entero, es una talla de madera para vestir. De cintura para abajo es también de madera, simulando un manto pintado. Lleva en el brazo izquierdo el Niño y en el derecho sostiene un cetro. El Niño bendice con la mano derecha y con la izquierda sostiene una bola que simboliza la Tierra, clara alusión a la redención.
La peana sobre la que se alza la Virgen está decorada con dos ángeles y un querubín central. La media luna es obra de Antonio Carrasco, realizada a fines del siglo XIX.
El culto a la Virgen de la Fuensanta es muy antiguo, pero es a partir de 1731 cuando fue tenida por Patrona principal de la ciudad y su huerta.
El conservador oficial de la Virgen designado por el Cabido Catedral es el escultor José Hernández Navarro.