Las parcelas demostrativas de cultivo de caqui establecidas en 2014 por la Oficina Comarcal Agraria Huerta de Murcia para comprobar su adaptación a las condiciones agronómicas de la zona, muestran la viabilidad de este cultivo tanto en la modalidad ecológica como tradicional, según se desprende de los últimos datos obtenidos. Durante estos años se han adaptado la fertilización, el manejo y el uso de técnicas para adelantar o retrasar la recolección.
La variedad de caqui plantada fue 'Rojo Brillante', la más cultivada en la Comunidad Valenciana, que es la mayor productora de España de esta especie. Las plantaciones se hicieron sobre el patrón Diospyros lotus y los árboles se formaron en vaso. Una de las parcelas cuenta con riego tradicional y otra con riego localizado.
Tras varias campañas se observó que el patrón Diospyros lotus mostraba ciertos problemas de adaptación a los suelos y aguas de la zona, por su elevada sensibilidad al contenido de cloro en ellos, que produce a finales de verano quemaduras en las hojas y falta de desarrollo en algunos individuos.
Por tal motivo, se repusieron las faltas que se iban produciendo en las parcelas con árboles de la misma variedad pero sobre patrón Diospyros virginiana, que demostró ser algo más lento en entrar en producción y retrasar algo la recolección de la fruta, pero a cambio mostró una elevada tolerancia a cloruros y un gran vigor una vez superada su etapa juvenil. También se plantaron algunos árboles de otras variedades no astringentes como Fuyu, Jiro y Hana Fuyu.
A partir del segundo año los árboles se transformaron de la formación en vaso a la formación con la denominada poda Mataix, que incluye podas en verano y en invierno. Este sistema de formación se ha mostrado superior a la formación en vaso, con buenas producciones y frutos de mayor calibre y peso.
La parcela en cultivo ecológico ha mostrado un buen desarrollo durante estos años, con producciones y calidades comparables a la de cultivo convencional. Las plagas y enfermedades se han controlado adecuadamente con los productos autorizados en esta modalidad de cultivo, siendo la mosca de la fruta (Ceratitis capitata) la de mayor incidencia en otoño, aunque esta ha variado mucho de un año a otro. La escasa superficie de esta especie que todavía hay en la Región hace que plagas y enfermedades no sean un problema, cosa que sí ocurre en las principales zonas productoras de España.
Esta iniciativa ha sido cofinanciada por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader), el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente, a través de la medida 1 del Programa de Desarrollo Rural de la Región de Murcia, gestionada por el Servicio de Formación y Transferencia Tecnológica.