El pasado viernes – 12 de mayo- las personas trabajadoras del transporte urbano decidieron en asamblea retomar el servicio.
La decisión ha venido determinada ante la comunicación realizada al Comité de Empresa, tanto por parte de la corporación municipal, como de la dirección de la empresa, de haber alcanzado un acuerdo económico para la gestión del servicio en el periodo de prórroga, acuerdo que lleva implícito la NO APLICACIÓN de la clausula de descuelgue del convenio colectivo pretendida por la empresa y que iba a suponer una reducción del 42 % de las retribuciones de los trabajadores y trabajadoras.
A pesar de no contar con ningún documento escrito que corrobore tal acuerdo, la plantilla en un gesto de buena fe y pensando sobre todo en los usuarios del transporte público, han decidido finalizar temporalmente las movilizaciones, cuyo epicentro ha sido el "Campamento Colorao" instalado en la sede de la empresa.
Tanto a la corporación, como a la dirección de la empresa, por parte del Comité de Empresa se les ha trasladado que el cierre definitivo del conflicto pasa:
Garantía de no aplicación del descuelgue del convenio colectivo.
Abono de los salarios adeudados (Paga extra de marzo y atrasos de la subida salarial de 2023).
Dejar sin efecto la apertura de expedientes disciplinarios que con motivo de los días de conflicto se han ido comunicando a la plantilla.
El Comité de Empresa está a la espera de que a lo largo de esta semana, se nos comunique una resolución firme por parte de la empresa y/o ayuntamiento, respecto a las 3 cuestiones que se han planteado, sin las cuales el conflicto no se tendría por cerrado.
El próximo viernes 19 de mayo se celebrará una nueva asamblea de trabajadores y trabajadoras, en la cual se dará cuenta de la información que se nos haya trasladado, actuando en consecuencia.