Los alumnos y profesores del Grado en Criminología de la Universidad Católica de Murcia han celebrado en el Campus de Los Jerónimos el día de su patrón, San Judas Tadeo, con una serie de actividades para vivir esta jornada de forma especial. En la plaza de las pérgolas han realizado varios talleres prácticos sobre aspectos esenciales del trabajo de campo de un criminólogo como desvelar huellas dactilares o buscar y marcar pruebas en la escena de un crimen.
Posteriormente se ha celebrado una charla en el salón de actos en la que han participado José María Caballero, vicedecano del Grado; Paz Velasco, jurista, criminóloga, escritora y divulgadora; y César Giner, director del Máster de Ciencias de la Seguridad y Criminología de la UCAM. Caballero ha recordado a sus estudiantes una de las premisas básicas que deben tener en cuenta durante la carrera y cuando ejerzan como profesionales: "El criminólogo debe ir al hecho concreto, contrastable y medible más allá de opiniones y teorías. Hay que acercarse al hecho delictivo sin prejuicios; así es cómo llegará a la realidad con una perspectiva abierta.
Paz Velasco, que recientemente ha publicado su nuevo libro 'Muertes nada accidentales', ha resaltado la importancia que ha tenido en su carrera la formación continua: "Un criminólogo tiene que estar al día porque la sociedad y el crimen evolucionan. Es un fenómeno social y conforme cambia un país surgen nuevas formas de delitos y criminales". Además, ha comentado que en su libro ha querido dar relevancia a las motivaciones detrás de los crímenes: "Responder al porqué forma parte de nuestra profesión. Necesitamos saber qué ha llevado a un criminal hasta el hecho delictivo. Para entenderlo hay que ir al origen y muchas veces encontramos respuestas en la niñez de esa persona".